En este periodo litúrgico, aprovechamos el acercamiento al otro, para dar a conocer el Kerygma  de salvación. La vida sacerdotal se reduce, no solo a la vida litúrgica, sino que se extiende a una entrega de oración, mística y sobre todo de caridad.....cumpliendo la labor encomendada .....su mirada es la Bendita Eucaristía, La Divina Liturgia de Ntro Padre San Juan Crisóstomo, arzobispo de Constantinopla, siempre la indicción, la Didaskalya, la Filokalia, y La Santa Biblia son piedras de consuelo que marcan camino seguro a la meta, corona de justicia......la palabra, la mente del Élder, esta anclada en una sabiduría apostólica, que es terapia de sanación, comprensión, virtud que se vive saliendo del interior 

Reflejar la mente de Cristo es nutrirse del lenguaje eclesiástico, de lo divino, del silencio, que es inseparable del Espíritu ...reflejar el Nous, que es de la Iglesia por la mente de Cristo. 

Gracias.